7 diciembre, 2024

Angélica aún espera regreso de su esposo, a 12 años de la desaparición de los 17 migrantes queretanos

Por Armando Guerra  

Landa de Matamoros, Qro.- 17 abril de 2022.- Aquí en un rincón de la sierra gorda queretana llora una mujer por la ausencia de su esposo, es Angelica Moya la mujer que sigue esperanzada en ver el regreso de su fiel pareja, ella a 12 años de la desaparición de su esposo, espera paciente el regreso del padre de sus hijos, ella guarda la ilusión y la esperanza de algún día se esclarezca el paradero de su cónyuge, ella tiene la fe en Dios de que pueda aun darse el milagro, ella es una mujer enferma y desamparada que desde hace casi 11 años llora la ausencia de su ser más querido.

“Le pido a Dios que haga el milagro y me de la dicha de encontrar a mi esposo, él era un buen padre que quiso darle lo mejor a sus hijos, decidió irse a los Estados Unidos para trabajar y comprarnos una casa donde vivir aquí en la comunidad de La Vuelta, me decía que desde niño le gustaban muchos los autos, para eso quería irse a trabajar al norte, para comprarse un carrito, se fue con las mayores ilusiones de darle lo mejor a sus hijos” dice al borde del llanto Angelica Moya.

Es la historia de uno de los 17 migrantes que un día decidieron buscar nuevos horizontes y encontrar el llamado sueño americano, se organizaron en la Sierra Gorda de Querétaro para irse a los Estados Unidos para darle una mejor vida a sus familias y encontrar mejores condiciones de trabajo.

El esposo de Angelica Moya formaba parte de los 31 trabajadores, de los cuales 17 eran migrantes queretanos originarios de Landa de Matamoros que desaparecieron en el mes de marzo del 2010, a la fecha siguen desaparecidos-, cuando un camión de pasajeros supuestamente los trasladaría del municipio serrano de Landa de Matamoros a la frontera norte del País, de ahí que su esposa Angelica aun guarda la esperanza de que las autoridades mexicanas logren esclarecer esta masiva desaparición de queretanos, de los que aun se desconoce su paradero y que su desaparición sigue siendo un gran misterio y una investigación aun no esclarecida.

En el norte del país, aquellos trabajadores migrantes intentaban cruzar la frontera con Estados Unidos en busca de mejores horizontes y con la mayor ilusión de darle mejor vida a sus familias, pues Landa de Matamoros según CONEVAL y algunos otros municipios serranos son consideradas zonas de alta marginación; no hay fuentes de empleo bien renumeradas el campo ya no produce, es cuando se sabe que cientos y quizás miles de queretanos están emigrando a la Unión Americana para encontrar mejores condiciones de vida.

El 17 de marzo de 2010, un camión de pasajeros hizo parada sobre la carretera Landa de Matamoros a Xilitla, ahí en la comunidad de El Lobo, subieron 17 queretanos, pues en el camión ya iban viajando 6 trabajadores del estado de Hidalgo y otros 8 del estado de San Luis Potosí, todos ellos indígenas de diferentes comunidades pobres de las zonas serranas de la huasteca potosina e hidalguense.

“Mis hijos y yo fuimos a dejar a mi esposo a la carretera que pasa por El Lobo, ahí lo despedimos con gran tristeza, el camión ya traía varias personas, aquí subieron 17 vecinos landenses, entre jóvenes y señores” rememora la entrevistada.

“Recuerdo muy bien que aquella despedida fue para mi muy muy triste, lo sigo recordando… todos mis hijos le dieron tal vez el último abrazo y beso a su padre….otras familiares también despidieron a sus hijos y esposos, ese día recuerdo que hubo abrazos y llanto, nunca nos imaginamos que jamás los volveríamos a ver” recuerda Angelica esposa de los 17 queretanos desaparecido hace 11 años.

Este es pues el triste relato de una mujer que aun espera el regreso de su esposo, ello a pesar de que ya pasaron 11 años de su desaparición, pero que guarda la esperanza y la ilusión de volverlo a ver o cuando menos si está muerto, que “me entreguen el cuerpo para darle cuando menos una cristiana sepultura, y no seguir viviendo ese martirio de seguir esperando a mi esposo” concluye.

Deja un comentario

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *